Suzuki Bandit 1200 S 2006

Los grandes cuatro cilindros con refrigeración por aire y aceite, los carburadores, ¡sabemos cómo amortizar la herramienta de producción de Suzuki! Pero la Bandit 1200 sigue siendo una referencia para ellos. Cosméticamente, hay una nueva carrocería refinada, un asiento ajustable en altura y un depósito de combustible acortado.

En esta versión, todas las tallas podrán poner los pies en el suelo, es práctico, y podrán agarrar el manillar sin tener que tumbarse. Esta última evolución puede recibir por fin el ABS, disponible desde hace tiempo en otros mercados. Era el momento de despertar.

La frenada sigue siendo típica, ofreciendo poco mordiente y suficiente potencia a pesar de una consistencia esponjosa, indica el concesionario de motos segunda mano Crestanevada. En su día, los antiguos propietarios de una 1200 corrían a las tiendas de accesorios para encontrar muelles de horquilla más duros. Hoy en día, los propietarios de los nuevos modelos saben hacer lo contrario porque el frontal es un poco rígido.

En la ciudad, el mayor problema de Suzuki es la distribución del peso. El gran peso está situado demasiado alto, no hace que te sientas cómodo, induciendo una dirección caída un poco como en una moto trail. Afortunadamente, el motor ofrece una grata flexibilidad y saca sus músculos a 3.500 rpm para alargar la zancada sin brutalidad pero sin fallar hasta las 8.400 rpm. A partir de ahí, todo se acaba y sólo hay que jugar con la excelente caja de cambios para volver a empezar.

Rodar en la gama de par mantiene el consumo a raya, ya que el viejo bandido, demasiado feliz de salir de su reserva, ¡a veces riega el evento inmoderadamente! La Bandit no rechaza la lucha, su frontal preciso y atento permite encontrar la cuerda sin dificultad. Entonces, es el gas a lo grande gracias a una parte trasera que ofrece una motricidad impecable. Perfecta en su anterior definición, la nueva cabeza de la horquilla y especialmente su baja burbuja, no ofrecen la esperada protección contra el viento.

Otro de los puntos fuertes de antaño es el confort del asiento, que ha retrocedido ligeramente. El asiento, ajustable pero más fino, es difícil de sentir en los viajes largos. Para terminar con las quejas, se ha reducido el espacio bajo el asiento.

Es una pena, ya que la capacidad de desplazamiento se reduce sin ninguna compensación deportiva. Es cierto que la competencia lo hace mejor y a veces infinitamente mejor en todos los ámbitos del juego, incluida la calidad de los acabados, uno de los defectos recurrentes del Suzuki. Pero a este nivel de precios, ¡todavía no hemos encontrado nada mejor!